domingo, 12 de abril de 2015

¡Una carta a Peter Pan!


Miércoles 25 de marzo de 2015.
Querido Peter Pan:
He escrito una canción para ti, desde hace tiempo debí escribir pero no lo hice y te pido una disculpa. Hace 1 semana 2 días cumplí 18 años; debo confesarte que me estoy dando cuenta de que todo lo que me rodea está cambiando, estoy perdida en este mundo, este mundo que está lleno de odio, ambiciones, adicciones, maldad, arrogancia y orgullo. Si de niña me formaba en las filas de los dulces gratis, ahora de adulta me debo formar en la fila del cajero donde recibes un papel arrugado y quizá deteriorado por los años, pero que el mundo considera de un valor exorbitante; supongo que un niño no vería ese papel como el mundo lo ve... El mundo nos roba nuestra inocencia, nos obliga a crecer, nos ordena que hagamos algo por nuestra vida, como si fuéramos máquinas para él. Todos parecen buscar algo que no encuentran, y fingen ser feliz, lo cual es falso... yo no quiero eso para mí. Estoy en este mundo pero no soy parte de él.
Todo este tiempo he sufrido, me han lastimado, y han roto mi corazón en miles y millones de pequeños fragmentos; ¡ojala nunca hubiera crecido!, yo nunca deje de desear ser niña por siempre, como tu. Aun vienen a mi mente cada momento de mi niñez, los Domingos de camino a Casa de la Tía Carmen, el encontrar estanques con ranas adentro en la casa de mis abuelitos; el soñar con osos, conejos, tortugas y demás animales peludos, mi cobija favorita, mi conejito (peluche), el olor de los hot cakes en la mañana, los pasteles de Tierra, mi película favorita, las paletas de plátano, los malvaviscos, el algodón de azúcar derritiéndose en mi paladar, los helados de limón, los cuentos en cacets, la música de la radio; todas esas cosas que me hacían sentirme viva... Las extraño...
Uno de los propósitos por los que te escribo esta carta es para hacerte una petición; si antes de ser adulta disfrutaba como nunca lo que me rodeaba y nunca me preocupaba por mi por venir, pero iré al punto, Peter, concédeme el deseo de volver a ser una niña de 12 años, esa niña con el alma aventurera, el espíritu puro, y llévame volando por los cielos y el universo para conocer el País de Nunca Jamás, con los polvos de hadas de campanita, con el Capitán Garfio, los niños perdidos, las sirenas, el clan de la tribu de los Indios (Los Picaninny), la princesa Trigilla y tu, Peter Pan. Por favor Peter, te prometo que si me llevas contigo, siempre habrá música en nuestra casa, tocaré el piano como la guitarra y tú me acompañarás con tu flauta de Pan, y juntos cantaremos y compondremos canciones; porque aun esta ese beso especial en el costado de mi boca, que aguarda por ti; te prometo también que tendremos aventuras juntos, que osaremos molestar al Capitán Garfio y a los piratas, dando el brazo de su Capitán como alimento al cocodrilo con el reloj, te prometo que siempre reiremos de la vida, te prometo que seremos los padres de los Niños Perdidos y que juntos esconderemos a Lelo, Rizos, Presuntuoso y a los gemelos, en una cueva para que Garfio no los encuentre, te prometo que haremos alianzas con los indios para derrocar a los malvados que conspiren contra nosotros, junto con Trigilla, te prometo que siempre creeré en las hada; pero llévame de este mundo hostil al País donde nunca jamás me tendré que preocupar por crecer. Peter tú tienes la palabra. Piénsalo, millones de aventuras, tu y yo contra el mundo. Seremos muy felices, pero si tu no deseas esto yo aceptaré si tu respuesta es un no. Puede que mi mundo no sea tan malo como parece, puede que yo deba encontrar el verdadero País de Nunca Jamás, dentro de mí, puede que las aventuras estén presentes siempre en mis sueños, pero yo nunca te olvidaré Peter, mi niño maravilloso, "el hijo de Nunca Jamás", mi "Líder de los niños perdidos", en mi joven corazón estarás incluso cuando envejezca.
P.D. Tú siempre serás mi "Beso especial" y siempre aguardará para ti.
Sincera por siempre... tu Wendy.

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